-VeintiOcho-
En algún lugar deben conversar todas las estaciones.
Yo estoy casi segura que es en la esquina que habla.
Hay en Buenos Aires una esquina en la que los vientos y las estaciones se encuentran a dialogar, cuando pasas por ella, no sabés si es invierno, verano u otoño.
Siempre es conveniente llevar saco.
se me escarchan los ojos, se me pone la piel de gallina, se me encoge el corazón...
y después de la conversación de anoche, después de recordar los motivos por los que me alejo de la gran ciudad, pero a la vez el imán que me produce por sus historias, por sus diálogos de pies que bailan sin parar, es perfecto venir a tu casa para seguir suspirando por los Aire Buenos, para seguir alimentándome de su PERFUME (te acuerdas?), de sus esquinas...de mí misma y de la soledad con la que algún día llegaré a abrazar una ciudad más que soñada, más que amada...
esas palabras tuyas mariposa parecen un regalo de un diálogo que comenzó anoche y que aún no ha acabado.