XXI
Finalmente he comprendido que no existo y que paso por la nada como una ráfaga de neón clausurada, censurada y abrumada.
Finalmente comprendí que no soy luz, no soy sombra, soy una ilusión que se desvanece en el agua, soy un rayo que ilumina de ausencia.
Finalmente comprendí, yo no soy.